La Terminal de Monte: cielo raso caído, cables y lámparas colgando, palomas y excremento
Vecinos, empleados de las boleterías y turistas, se mostraron preocupados por la dejadez que presenta la Terminal de Ómnibus de nuestra ciudad. Para quienes son asiduos del lugar, la situación no es novedad y “ningún gobierno se hace cargo”.
El edificio se encuentra ubicado al lado de la Estación Ferroviaria, sobre Ruta Nacional N°3. Su mantenimiento y funcionamiento es de participación “mixta”, en este caso tiene potestad el Municipio y un privado que desconocemos quién es.
Para saber porqué se llegó a este punto, y teniendo en cuenta que no es la mejor postal si queremos atraer turistas, a fines de agosto nuestro diario se presentó en el Palacio Municipal. En Obras Públicas nos dijeron no estar en tema y que no había quejas, nos invitaron a formalizar un reclamo en una «ventanilla de atención al vecino».
Paralelamente nos comunicamos con el área de prensa, con el Responsable de Gestión Institucional, Dr. Matías Balsamello, y con la Directora de Turismo, Lic. Alejandra Benítez.
Facilitamos las fotografías al ejecutivo y quedó el compromiso de trabajar en la cuestión. Han pasado 23 días y todo sigue intacto, con la diferencia de que están en conocimiento.
Las fotografías, proporcionadas por un joven que viaja diariamente a Cañuelas en la Línea 88, avalan el título de esta publicación. Sin lugar a dudas hay un marcado desinterés, o queda pensar que son insuficientes los recursos humanos y económicos.
Chequear el material, sin importar de quién proviene o por dónde es recibido, es un procedimiento más que importante para M24Noticias. Nos acercamos y las fotografías seguían tan vigentes como cuando se tomaron.
El falso techo presenta importantes daños; caños corrugados, cables de energía eléctrica y lámparas cuelgan como adornos; al menos 15 palomas permanecen, anidan y producen heces hasta que son expulsadas, pero luego regresan; caños de agua rotos; puertas que no cierran, entre otras cosas.
No es solo una cuestión de estética. Estudios indican que los excrementos de paloma pueden transmitir, cuando se inhalan, hongos Cryptococcus, responsables de enfermedades como la criptococosis (infección pulmonar) y la neurocriptococosis (infección del sistema nervioso central).